Cada ser vivo que habita el planeta tiene una función especial para la preservación de nuestros ecosistemas. Las abejas, por ejemplo, tienen un papel esencial, pues a través de la polinización contribuyen a la seguridad alimentaria y a la nutrición, proporcionando alimentos de alta calidad como la miel, la jalea real, la cera de abeja, el propóleo y el polen que ayudan a mantener la salud de las personas y del planeta. Es por ello, que enseñar y animar a nuestros hijos a cuidar y proteger a las abejas, es de vital importancia para alcanzar un impacto positivo en el medio ambiente y en la biodiversidad. A continuación, enumeramos algunas acciones que puedes llevar a cabo, en compañía de tus pequeños, para ayudar a preservar a las abejas y otros polinizadores:
. Crea una zona de polinizadores en tu jardín, balcón o terraza, plantando flores que produzcan néctar, como caléndulas o girasoles.
. Espera a que las plantas nectaríferas hayan terminado de florecer para corta la hierba de los prados.
. Apoya a tu apicultor local más cercano comprando miel y otros productos de la colmena.
. Utiliza pesticidas amigables con las abejas y rocía las plantas preferiblemente temprano en horas de la mañana o por la noche, cuando las abejas se retiran de las flores. Igualmente, ten en cuenta que no haya viento al momento de aplicar el producto.