Noticuento


Ella lo denunció

En esta época de pandemia, la violencia se disparó. Los noticieros informaban cada día una situación de violencia hacia la mujer dentro de cada región.

Ella apagó el televisor y se sentó con resignación, pensando en su vida y en su diaria situación. ¡Ella, formaba parte de esas víctimas a las que el noticiero mencionó!

Desde el primer día en que se casó, su vida inevitablemente cambió. El hombre de quien se enamoró no era lo que ella pensó. Cada día era un martirio, pero la mujer no tomaba ninguna acción que le cambiara su diario vivir y pensaba que aguantar era lo mejor.

Una noche, después del trabajo, el hombre llegó y la encerró, la maltrató y la humilló sin ninguna consideración. Ella seguía sumisa con miedo y resignación, creyendo que algún día… él cambiaría por amor.

Pero a medida que pasaba el tiempo la situación empeoró, los abusos eran más frecuentes y la sevicia se incrementó. Su hogar se fue destruyendo, ¡el cansancio y el sufrimiento la invadió! Entonces, decidió enfrentar a su verdugo y ante las autoridades lo denunció.

Sin embargo, aquel llamado de auxilio nadie lo escuchó. Por el contrario, las leyes parecían proteger al abusador y dejaban a la mujer en estado de indefensión.

Existen en el mundo países que no toman ninguna acción, abandonan a sus mujeres a su suerte y sin protección. Es importante el apoyo de la justicia y de los gobiernos para combatir tan denigrante acción y para parar con el feminicidio que, durante la pandemia, en muchos países del mundo ¡se disparó!

FIN

Eng

Muy preocupante
Un nuevo informe de UNO Mujeres alerta sobre el incremento de la violencia contra las mujeres durante la pandemia de COVID 19, tanto en sus hogares como en espacios públicos. El documento resalta que una de cada dos mujeres ha experimentado alguna forma de violencia. Basado en datos de encuestas realizadas en 13 países del mundo, el informe concluye que cerca del 25% de las mujeres se siente menos segura en su hogar y que los conflictos familiares se han incrementado desde el inicio de la emergencia sanitaria. Igualmente, el 40 % de las participantes afirmó que desde que empezó la pandemia se siente menos segura caminando sola por la noche. Además, tres de cada cinco piensan que el acoso sexual en espacios públicos ha empeorado. El documento también revela que entre los factores socioeconómicos que han influido en el bienestar general, en la inseguridad o en la violencia contra las mujeres, sobresalen la presión financiera, la falta de empleo, la inseguridad alimentaria y las relaciones familiares. Un grupo de expertos de la ONU en derechos humanos afirmó que: “las mujeres y niñas de todo el mundo pueden ser asesinadas y sujetas a violencia, intimidación y acoso cuando hablan, por el simple hecho de ser mujeres y niñas. La violencia contra ellas es el resultado de la discriminación social, política, económica, racial, de casta y cultural que se perpetra a diario contra las mujeres y las niñas en toda su diversidad, incluso en el contexto de los conflictos armados”. También recalcaron que de acuerdo con el derecho internacional, los estados y la comunidad internacional tienen la obligación de abordar esta violencia. “La violencia contra las mujeres y las niñas florece porque no hay impedimentos ni se exige una rendición de cuentas de quienes buscan silenciarlas y facilitar su explotación, abuso, mutilación y asesinato”, afirmaron. Finalmente, es prioridad que los gobiernos desarrollen leyes y entornos propicio para que las mujeres gocen de sus libertades fundamentales de expresión, asociación, reunión pacífica y participación pública libres de intimidación y ataques. “Si queremos evaluar la salud, la seguridad y la prosperidad subyacentes de una sociedad, todos debemos cumplir con nuestro deber de participar en el respeto y la promoción de los derechos de las mujeres y las niñas. No habrá prosperidad sin poner fin a la violencia que las asola en el ámbito público y privado”, concluyeron los expertos.